• El Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional, en Guanacaste, ha abierto sus puertas en septiembre con todos los protocolos de esta “nueva normalidad” para que el visitante pueda contemplar el bello fenómeno de la llegada de tortugas lora con total tranquilidad.
  • La posición geográfica de Costa Rica favorece la llegada de tortugas a lo largo de todo el año. De las siete especies marinas existentes en todo el mundo, Costa Rica disfruta de la visita de un total de cinco especies que desovan en el País de la Pura Vida.

La tortuga lora es la única especie que anida de manera masiva y sincronizada, fenómeno conocido como arribadas. Existen nueve sitios en el mundo donde se lleva a cabo este acontecimiento natural. El Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional, en Guanacaste, es uno de los sitios con mayor frecuencia de este fenómeno y con mayor cantidad de individuos, y ha abierto al público para comenzar con la “nueva normalidad” y que todos los visitantes tengan la oportunidad de disfrutar de este bello fenómeno natural, el cual normalmente ocurre una vez al mes durante todo el año. 

Es importante destacar que en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional existe un modelo de gestión participativa en el cual la Asociación de Desarrollo Integral de Ostional (ADIO) y los Guías Comunitarios Acreditados de Ostional colaboran con el ordenamiento de la actividad turística, brindan vigilancia a la playa los 365 días del año, mantienen la playa limpia, contribuyen a mantener en condiciones idóneas el hábitat de anidación y colaboran con la gestión del Refugio.

La administradora del Refugio, Yeimy Cedeño, ha informado que, con motivo del COVID-19 y debido a las restricciones establecidas en cuanto a la implementación de protocolos y horarios de apertura de las playas, la observación de tortugas ha estado limitada durante los últimos 6 meses desde que empezó la pandemia, y ha sido en septiembre cuando se ha logrado la reapertura, una vez que la comunidad se ha encontrado lista para implementar los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud.

Para conocer un poco más de cerca a la tortuga lora es importante destacar que es la tortuga marina más pequeña, mide hasta 70 centímetros, pesa de 40 a 50 kilogramos, es de color verde oliváceo o gris oscuro y su fuente de alimentos son los moluscos, peces y crustáceos. Además, anidan de forma solitaria y de manera masiva en las arribadas y es la especie más común en el Pacífico.

La llegada de tortugas para desovar al lugar donde nacieron décadas atrás es un auténtico espectáculo natural. Las “arribadas” normalmente están asociadas a las fases lunares de cuarto menguante, sin embargo, no se debe perder de vista que este es un fenómeno natural y por tanto es impredecible. Después de dejar sus huevos en la arena, las hembras regresan al mar a primera hora de la mañana, y en cada salida, las tortugas lora dejan un promedio de 105 huevos. Además, de enero a julio se suelen reunir entre 10.000 y 20.000 tortugas por espacio de tres días al mes, mientras que de agostoa diciembre el número de tortugas aumenta a unas 200.000 y la duración de la arribada puede ser de cinco o seis noches.

Generalmente, las hembras salen por la noche a desovar, pero a veces, en arribadas grandes, lo hacen durante todo el día, aunque este comportamiento también es impredecible. La observación de la especie se convierte en una auténtica delicia para la vista y una experiencia inolvidable, y en ocasiones se puede observar la llegada de tortugas hembra con el nacimiento de las pequeñas crías intentando adentrarse al mar

Desde el mes de agosto se reactivaron las conexiones aéreas entre Madrid y San José con Iberia, sin olvidar que, en el mes de julio, el país de la Pura Vida obtuvo el sello “Safe Travels” – WTTC – que lo acredita como un destino apto, con protocolos necesarios y con medidas sanitarias para viajar en este contexto del “Covid-19”.